La lámpara es una pieza de diseño elegante y de líneas austeras. Además de su pureza formal, ofrece una gran calidad material e impecables acabados. Su base es lacada y su difusor de vidrio opal.
Tiene además una triple personalidad. De día aparece en escena como una pieza plástica, una escultura integrada en el salón que permite ser ubicada en cualquier sitio y posición sin invadir el espacio.
Durante la noche al encender su difusor superior de vidrio soplado opal brillo triplex
el escenario en el salón se transforma nuevamente: una luz ambiental confortable y cálida baña el espacio consiguiendo dar una atmósfera muy acogedora.
Cuando queremos crear una escena más intimista, podemos encender solamente
los LEDS que iluminan el interior de la base, ofreciendo un efecto mágico al quedar el interior de la pieza iluminada. El salón entonces tiene una luz indirecta de orientación muy relajante, ideal para marcar los límites del espacio y situarnos, incluso para ocasiones de “home-cinema” o similares.
