La fuente de Perpignan (en Francia) es una fiesta para los ojos que evoca el espíritu de la antigüedad cuando entretenía y refrescaba a los habitantes de la ciudad. Detrás de la fascinante danza visual del agua y de la luz se esconde un sistema con tecnologías de punta que devela todo el poder y la versatilidad de los LEDs.
El control de los 900 puntos de luz incrustados en los distintos chorros de agua se logra de manera central por computadora y proporciona rutinas de colores que coordinan luz, agua y música.
La nueva fuerza de la fuente de Perpignan promete convertir el centro de la ciudad en una espectacular ilustración llena de efectos que se hacen presentes gracias a la tecnología LED.